SELVA DE OZA. GUARRINZA, RENCLUSA,

Peña Fumia y detrás Peña Forca

PEÑA FUMIA DESDE PEÑA FORCA

DOLMEN EN AGUAS TUERTAS

Mallo Da´s Ferrerias

al fondo Petraficha

Puntas de Tortiella y Chipeta Alto 2.189

Peña Lo Riste

Selva de Oza con Peña Forca 2.387m

Punta Aguerri 2.449m

La Selva de Oza es uno de los valles aragoneses con más fama. ¿Quien no ha caminado por sus bosques llenos de magia, con hayas, robles y abetales, donde residen las hadas y los duendes?

Es el lugar donde reposan los restos de nuestro amigo JOSE PLO, dando vida eterna a la haya que lo cobija. Es el lugar donde nuestros antepasados, hace 3.000 años, cazaban o pastoreaban sus ganados. En la Corona de los Muertos, se han encontrado más de 120 círculos de piedras que pudieron ser asentamientos circunstanciales para aquellos cazadores, pues sus 5.000 vestigios de silex, así lo prueban. También cobra fuerza la teoria de que fue aquí donde se venció a las tropas de Roldán, sobrino de Carlomagno, y no en Roncesvalles. Prestigiosos arqueólogos mantienen esta teoria a la vista de hallazgos de pertrechos diseminados de aquellas tropas, como en un campo de batalla.

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Cruzamos el barranco de la Boca do Inferno, custodiado en ambas vertientes por los gigantes de Punta Aguerri y Peña Fumia. Enseguida el praderio de Oza nos recibe, vigilados por Peña Forca o Castillo D'Acher, donde las familias retozan en la hierba, f.esca y húmeda. Continuando por el cauce del rio Aragón Subordan llegaremos a Guarrinza, camino de Aguas Tuertas y el Puerto del Palo. Aquí confluyen tres valles, hacia Petraficha, a Ferrerias y a Aguas Tuertas, con su espléndido dolmen. Cualquiera de las rutas nos revelan un paisaje tan bello como agreste.

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Pasado Siresa, con su monasterio de San Pedro de Siresa, fundado el siglo IX, hay una pista que lleva a un valle recoleto, en dura pendiente hacia la cara sur de Los Alanos, donde podremos ascender a Peña Fumia o al Alano d'Achar. Prolongando el esfuerzo hasta Peña Forca, la vista no nos cabe en los ojos. El valle es la Renclusa, del mismo nombre que el refugio al pie del Aneto. En este valle podemos dar fe de haber oido a un oso,en la umbría del hayedal profundo, que nos hizo tomar la senda de bajada con la misma prisa que demuestran los que la que tienen. Hay testigos.


Selva de Oza

fotos y texto Eugenio Mateo