OPINIONES Y HECHOS: CON RAFAEL ARANDA EN SU ESTUDIO

viernes, 25 de julio de 2014

CON RAFAEL ARANDA EN SU ESTUDIO

Cartel diseñado por Rafael Aranda para su próxima exposición en el EDAN

Desde el balcón de su estudio

Uno de los monotipos de la exposición

Rafael Aranda

fotos: Eugenio Mateo

Desde su estudio, Rafa salía al balcón para ver al Ebro transitando frente al Pilar. Casi se asomaba al pozo de San Lázaro desde su atalaya privilegiada. Hoy la especulación levanta frente a su casa, poco a poco, un muro de hormigón y cristal que serán nuevas colmenas de lujo para los que ocupan la primera línea de río. Aunque no lo aparente, le importa, y mucho. En su natural tranquilo hay un punto de rencor amaestrado y sigue trabajando ajeno a tantas cosas pero nunca renunciará a la herencia de ser un chaval crecido a la orilla del puente que hunde sus raíces en la historia. Le imagino tirando de archivos digitales del antes y el después. Habíamos quedado temprano y me recibió casi con los velos del sueño desperezándose por su mirada verde de río limpio. Yo quería ver las obras que nos traerá a su exposición de septiembre, que ha titulado Sendas. Son monotipos que nos sitúan en encrucijadas de ida y vuelta en el papel y en la opción de espectador que nos permite encontrar toda una caterva de significados que parten en todas direcciones, como en una ruta con distintos destinos.

Rafael Aranda es un artista enrevesado, no porque sea difícil de clasificar o de hacerse entender sino porque no tiene reposo en una imaginación que se derrama sobre tantas técnicas como se proponga: pintura, fotografía, grabado, monotipos, ceras, collages, acuarelas, instalaciones, dibujo, moldeado, todo un universo creativo bajo una mirada burlona con un mucho de timidez. Es un creador con muchos entresijos, licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Cuenca, como otros artistas aragoneses que conocemos; Rafa es un experimentador con la poesía que se contiene en los objetos y cuenta, y cuenta historias que se engarzan como algo fácil de entender aunque lo fácil exija un esfuerzo añadido para no resultar indescifrable. Se nota su pasión por la enseñanza y pretende educar la natural curiosidad por lo cotidiano con un discurso que huye de las pompas y de las vanidades, en el lado opuesto de lo artificial, atento al desarrollo de lo visual que le rodea.

Le he pedido permiso para traer a este blog alguna de sus experiencias con lo plástico. Las que presentará en el Espacio Nazca las reservamos para ser vistas entonces. Las fotos que ilustran son una pequeña muestra de su quehacer diario. Una muestra de su desbordante capacidad.