jueves, 30 de julio de 2015

VOLÚMENES INANIMADOS

Están en el planeta Tierra desde su creación. Estarán cuando nosotros nos hayamos extinguido. Sin embargo, nos fijamos poco en ellas, a no ser que formen parte permanente de nuestro escenario, y aun mirándolas, dejan de tener valor apenas descubiertas. Hablamos de las rocas, de las piedras que son páginas ilustradas de la memoria que se pierde en los tiempos. Los japoneses, siempre atentos al espíritu, practican una técnica como el Suiseki, o contemplación de pequeñas piedras que recuerden un paisaje o formas antropomorfas.
A lo largo del cauce del rio Garona, sus orillas sorprenden por sus grandes rocas, con variadas formas que las corrientes y avenidas de este bravo río han ido modelando para devolvernos perfiles a los que sólo la imaginación es capaz de poner nombre. Insólitas presencias surgen también en plena naturaleza alpina, en estos casos, la simbiosis vegetal añade sutiles texturas que acabarán por cubrir de vida la exigente dureza de la piedra
Es una galería  de naturalezas muertas que invitan a la contemplación. Inanimadas, inertes, estáticas, mudas. Un libro que se deja tocar y en cuyas marcas se vislumbra el caos de toda génesis mineral. 

























Fotos- Eugenio Mateo

domingo, 26 de julio de 2015

SOS DEL REY CATÓLICO, PAISAJE URBANO


A pesar de que Sos del Rey Católico es uno de los destinos turísticos importantes de Aragón, parece que la red vial todavía no se ha dado por enterada de que fue galardonado como pueblo más bonito Así, los últimos kilómetros desde Castilliscar  se convierten en broncos merced a una carretera, que sin bien hasta allí era  magnífica, en la ascensión al puerto de Sos desmerece el paseo hasta la villa en la que la Reina Juana Enriquez dió a luz al que sería Rey de Aragón como Fernando II, y Fernando V de Castilla, llamado El Católico.

Acompañado por los fotógrafos Miguelón Sanz y Teo Félix, hemos venido hasta donde las Cinco Villas miran a Navarra con la intención de integrarnos en el paisaje urbano de Sos para capturar instantes de un pasado. Su caserío, rodeado todavía por murallas, permite el acceso a través de siete puertas e imagino la impresión de García Berlanga para decidirle a rodar aquí su famosa "La Vaquilla". A lo largo de la visita aparecen las sillas de rodaje de los protagonistas, en bronce, para que se perpetúen en la memoria. Es un homenaje de gratitud de un pueblo que saltó a la fama a través esa película. (Es curioso el efecto "resucitador" del cine, en el castillo de Loarre tendríamos otro ejemplo)

Cada rincón, cada casa, calle, detalle,instante, luz, escenario vivo, permite el frenesí del disparo. Esta es una selección de algunos.





Iglesia de San Esteban, desde el XI



Judería




San Esteban, portada románica XII  y pórtico del XVI





Castillo XII  Torre del Homenaje







Patio del Ayuntamiento

Colegio Isidoro Gil de Jaz          XVIII

Casa de la Villa    XVI




Palacio de los Español




Desde El Parador


fotos: Eugenio Mateo