miércoles, 2 de septiembre de 2009

HAIKUS DEL HOSPITAL

En estos dias pasados, he vivido más en el hospital que en mi casa y todas las situaciones que he sido capaz de percibir, han dado lugar a la creación de unos haikus que intentan reflexionar sobre mis sensaciones.
Si ya es fatal circunstancia estar en un hospital, ya sea de enfermo o de enfermero, aunque no son iguales las vivencias, ciertamente, lo es también tener unos compañeros de dolor en la cama contigua que han sido perfectos homínidos con vestimenta casual. Les pido perdón, desde aquí, porque reconozco que no supe aplicar la Teoría de la Evolución y en más de una ocasión perdí la perspectiva. Pero finalmente reconozco que la desgracia une sin saberse y esta anécdota ,ya, es una pequeña concesión a la soberbia en un lugar en que las miserias humanas ponen a cada cual en su sitio.
Lo extraordinario, lo gozoso, es que mi madre ha mejorado, capeando con soltura a este toro zahíno y salimos de la plaza por la puerta de ambulancias.
haikus del hospital
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.
Pasan las horas
pero no me atrevo
a descontarlas
.
Hoy es domingo
el personal clínico
arrastra los pies
.
Ella dormita
nosotros dormitamos
el hospital no
.
giran tan lentas
las agujas del reloj
que se retrasan
.
Su respiración
flota con amenazas
de velos rotos
.
Es el espacio
entre allá y aquí
lo que separa
.
Me mira pero
no me vé / solo sonrie
al infinito
.
En sus ojitos
de niña vieja saltan
sueños lejanos
.
Te devolvemos
el tiempo que nos diste
tan generosa
.
Los pasos llevan
a lugares donde no
hay vuelta atrás
.
Ocurren cosas
cada día que ayudan
a guardar rencor
.
La provocación
es una trampa sutil
en la que caemos
.
Las apariencias
engañan solo a los
que no las miden
.
La antipatía
es de ida y vuelta
por recíproca
.
Es un buen día
para vomitar miedos
de malos tragos
.
No me importan
esos rostros odiosos
si no los miro
.
Soy imperfecto
lo lamento tanto que
se me olvida
.
Renacen deseos
supervivientes al fin
que te devuelven
.
26.08.09 haikus de E.Mateo

1 comentario:

  1. Al final lo único importante, fue la mejoría de tu querida madre, lo demás son hojas secas en el asfalto humano...

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