Si caminas encorvado por el frío no verás los muros con estos tags, throw-up, pieces y slogans que los escritores van dejando en tu camino, como la tabla de salvación del que se siente perdido en la ciudad con aceras llenas de mierdas de perros y bancos astillados. No me apetece atender los claxons que quieren sorprenderme al cruzar la calle ni respirar el humo de los autobuses. Llevo una máscara imaginaria, soy el ciudadano sin censo, una línea en la lista de los más buscados. Soy el hombre peligroso que nunca rompe un vaso. Adalid de la lucha sin vencidos. El virus de la gripe sin código en el vademecum. Soy nadie, pero veo lo que miro, sólo lo que miro. Midiendo las tapias me perdí para convertirme en grafito. Ya no me encontrarás en un paso de cebra porque cambié por aerosoles mi paseo inexistente.Ahora soy un artista callejero, perro callejero, mierda callejera, escupitajo callejero. Ahora soy un cara sol donde se apoyan los viejos, en el que aparco mi coche imaginario. Pónme una multa, esbirro uniformado o bórrame con tinta china, porque mañana escribiré tu epitafio aunque no lo esperes. Quedan muchas tapias para escribir mensajes que nadie va a leer aunque sólo tu rechazo me da más bríos para clamar a los cuatro vientos que soy el mirón que acecha tu descuido. No te fíes pero hazlo si quieres, me importas tan poco que escribiré tu cara aun cuando no me la enseñes.
texto y fotos de Eugenio Mateo
texto y fotos de Eugenio Mateo
Eugenio
ResponderEliminarLa singuralidad y el teson por educar los cerebros secos de la sociedad de consumo, es una labor de titan cisterciense, pero lo consigues. Espero que siguas siendo peligroso educandonos con cultura. Bravo
Grande Eugenio!!!
ResponderEliminarYo soy un coleccionista y degustador de estos excipientes arte(sanos)y arti(stikos) y desde luego que hay muchos interesantes, entre otros que podrían ser fácilmente prescindibles, claro.
ResponderEliminarGracias, Mateo.
Un abrazo
Mariano.