Recibimos invitación para la inauguración de la exposición “De razón y sensibilidad”, en la Galería Carolina Rojo (c/ Albareda, 6, escalera derecha, 1º 3ª) y para allí que nos fuimos, más aún si tenemos en cuenta la autora que la protagoniza: Edrix Cruzado.
Nos encontramos allí con una muestra de su producción y un cuidado folleto en el que nuestro amigo Ángel Azpeitia, Presidente de Honor de la Asociación Española de Críticos de Arte, comenta la obra de Edrix. No seré yo quien añada nada a lo escrito por Ángel pero, con su permiso, voy a reflejar aquí algunos de sus comentarios. Nos transmite el crítico que el trabajo de la portorriqueña Edrix Cruzado (residente en Zaragoza desde hace tiempo) ofrece una equilibrada síntesis de lo racional y lo sensitivo, de lo externo y lo interno. Sus cuadros suponen “organismos vivos latentes”, que muestran pintura y volumen, por ejemplo, fotografía y objetualismo, vacío y lleno, silencio y sonido, reposo y dinámica. Su fase actual arranca de un enorme interés matérico, e integra pequeñas piezas de desecho y elementos naturales como ramas o fragmentos de ellas. Lo que aquí expone se articula en tres bloques o propuestas, de los cuales los dos primeros descubren cierto carácter erótico. Por una parte alude al íntimo triángulo que se consagra a Venus, a través de la forma del soporte y los cables de cobre que en él implanta a modo de bello. Por otra, la maraña de estopa que enlaza con dichos cables (distintas en su color, no metálica) aparece sobre fotografías, que situaríamos sobre 1900, de un deliberado aire Camp. Resta el último grupo que cursa con acero inoxidable o cable también de acero sobre lienzo o incrustado en él. Añade también, en algunas de sus obras, otros elementos como bambú o maderas varias. Edrix refleja en sus creaciones un mundo interior inteligente, lúcido, afectivo y sensible, de alto nivel visual.
Hecho este resumen del texto elaborado por Ángel Azpeitia quien, por cierto, está a punto de cumplir 50 años como crítico de arte, nos resta comentar la gran afluencia de invitados que asistieron al evento inaugural, todos ellos atendidos por Carolina Rojo: desde artistas como Paco Rallo, Arturo Gómez, Mariela García Vives, Miguel Ángel Arrudi, Horacio Gulias Vidal, Cristina Beltrán o las hermanas Julia y Fefi Reig, hasta críticos de arte como el propio Ángel Azpeitia o Manuel Pérez-Lizano, pasando por periodistas como Desirée Orús y gentes del mundo de la cultura como María Antonia Díaz (de la Asociación de Artistas Plásticos Goya), Carmen Inchusta, la galerista Cristina Marín o el coordinador del Espacio Cultural Adolfo Domínguez, Eugenio Mateo. Entre otros muchos, incluyendo buen número de coleccionistas y empresarios.
La exposición puede visitarse hasta el 10 de Mayo
Maria Antonia Diaz, Eugenio Mateo y Manuel Perez Lizano
texto y fotos de Manuel Medrano
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