TANTOS

Tantos mártires en vano,
tantos,
como tantas flores nacidas en barbecho.


Tantos pensamientos extraviados
por volar desmasiado lejos.


Tantos corderos en busca de pastor.


Tantos ilusos bien nacidos.


Tantos tontos con porfía,
sin redención posible.

Tantos listos evitando enseñar
al que no sabe.


Tanta la inmodestia del pobre charlatán
que intenta convencerse
de ser el elegido.

Tanto el desvarío de la búsqueda.

Ausencia de tanto.

Tanto de nada.



©Eugenio Mateo Otto